Cancún.- Esta mañana, personal directivo del CBTIS 111 de Cancún realizó, por segundo día consecutivo, una revisión en la entrada de los alumnos a este plantel, como medida preventiva, luego que surgiera una amenaza escrita el martes pasado en el baño de caballeros. Sin embargo, esto no incluyó el “Operativo Mochila”, por requerir esto autorización de Derechos Humanos.
De acuerdo con los directivos de esta escuela, ayer solicitaron por escrito la presencia de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Quintana Roo para realizar el «Operativo Mochila», pero todavía no han recibido respuesta.
Lili Montero, secretaria técnica de este plantel, informó que están esperando que esta instancia les den «luz verde», para implementar dicho operativo, el cual, dijo, «no se realizará en la hora de entrada de los alumnos».
Agregó que en dicho operativo participaría, además del personal del plantel, autoridades del Grupo Especializado de Atención a la Violencia Familiar y de Género (Geavig) y el Comité de Padres de Familia.
Además, dijo que Pedro Murguía Salgado, director de esta escuela, en las próximas horas dará a conocer un informe completo sobre las medidas implementadas.
UNIFORMES OBLIGATORIAS
De manera alterna a esto, cabe mencionar, a las afueras del plantel se mantiene la presencia policiaca, que se ha dejado ver desde la entrada de los alumnos al plantel. Los agentes no permiten la entrada de los menores, a no ser que cuenten con su uniforme completo.
Asimismo, durante este lapso estuvieron presentes algunos padres de familia, como el señor González Vázquez, quien, en entrevista, lamentó que, producto de este «acto inconsciente», se hayan endurecido las medidas de acceso.
En ese sentido, el señor argumentó que, a causa de la pandemia, y debido a que muchas familias se quedaron con pocos recursos, se les facilitó a los alumnos la medida de entrar sin el uniforme completo.
«Y ahora, no hay uniformes en ningún lado, hasta el siguiente semestre, por lo que esperemos que las autoridades tengan un poco de conciencia en ese sentido», recalcó.
Por otro lado, agregó que es probable que «la pinta» se haya realizado por la tarde, pues, de acuerdo con compañeros de su hijo, los alumnos del turno de la mañana no notaron la presencia de la frase amenazante en el baño de hombres.
«Esperemos que el muchacho que lo haya hecho, si está traumado, que sus padres lo aconsejen, porque hay mucha responsabilidad de parte de nosotros como padres de familia; dejamos al garete a nuestros hijos, pensamos que por estar a este nivel de estudios, ya pueden vagar solos, y no, está el peligro al acecho de ellos», aseveró, finalmente.