Cancún.- Aunque todavía deberán analizarse los niveles de reservaciones y eventos que han sido pospuestos, así como la velocidad de la recuperación y reactivación de los mercados, la secretaria estatal de Turismo, Marisol Vanegas Pérez, estimó que para fin de año, Quintana Roo podría haber recuperado el 50% de su actividad turística, con paralizada por culpa de la pandemia de COVID-19.
Lo anterior lo afirmó en un “webinar” (neologismo inglés, mezcla de web y seminario) organizado por la Asociación Femenil de Ejecutivas de Empresas Turísticas (AFEET) con el nombre de “El turismo, la fuerza que nos une”, difundido por las redes sociales de esta organización.
La funcionaria estatal estimó que el turismo nacional será el primero en reactivarse, aunque también deberá observarse a los visitantes fieles, pues el 25% de quienes visitan Quintana Roo lo han hecho más de cinco veces y es de esperarse que al reestablecerse la conectividad aérea querrán regresar. También se contará con el sector de charters, más rápido en reaccionar que el de vuelos regulares, y por último los eventos reprogramados.
Vanegas Pérez comentó que las reservaciones hechas para estos meses de emergencia sanitaria fueron en su gran mayoría pospuestos, no cancelados, en gran parte para los meses de septiembre y octubre.
“Deberemos esperar al fin de año para estimar un crecimiento mayor, pero al cierre de diciembre, habremos recuperado más del 50% de la operación natural que hemos tenido. Habrá un 50% que tendrá que recuperarse en 2021”, auguró la secretaria.
Posteriormente, aclaró que este 50% de movimiento turístico podrá significar que el 100% de las empresas del sector ya estén funcionando, aunque con la mitad de su ocupación o capacidad habitual, o bien que solo un número de estas empresas lo hagan, con una estrategia agresiva, y que otras todavía esperarán hasta 2021.
Aquí comentó que se debe navegar con mucho cuidado, pues lo que se busca evitar es que por la caída en la oferta, se reduzcan las tarifas, situación innecesaria, pues los destinos de Quintana Roo son resilientes, cuentan con valor agregado y tienen mucha fidelidad por sus turistas.
“Con (el atentado a) las Torres Gemelas, se redujeron las tarifas y no se pudieron recuperar sino hasta 28 meses después”, recordó.
Por ello, se necesitarán muchos pactos y acuerdos en el sector, para evitar reducir tarifas, mantener la solidaridad en cuanto a la preservación del empleo, enfocarse en que la proveeduría sea local y que se liquiden las deudas con estos proveedores.
“Es una cadena muy intensa y de mucho trabajo”, aseveró.
Pero no solo es una situación futura, sino actual, aclaró, pues ahora se avecina un mes muy complicado en lo económico e incluso social, pues se prolonga la actual parálisis productiva. En ese contexto, es importante fomentar la solidaridad, con los vecinos, empleados, proveedores y más.
Autoridades estatales y del Consejo de Promoción Turística de México trabajan en la planificación del inicio de la recuperación, a través de conferencias y capacitaciones para empresas del ramo.
También se alista una plataforma web, para mediados de mayo, en la que empresas podrán certificarse en el correcto seguimiento de las medidas de prevención.
La reapertura en sí dependerá del control del coronavirus y de la política nacional, e incluso internacional, pero ya se prevé continuar con los actuales mecanismos de vigilancia, posiblemente reforzados, para evitar el riesgo de reinfección.
Cuestionada sobre la emisión de pasaportes sanitarios, o solo permitir viajar a quien se haya realizado una prueba de COVID-19, indicó que eso no es una iniciativa local, pero que estarán atentos a si se implementan a nivel internacional.
Recordó que el turismo aporta el 10% del Producto Interno Bruto de México y el 10% de sus empleos. Quintana Roo genera el 43% de las divisas de turismo, con una derrama de 15 mil millones de dólares anuales.
En el estado se construían 16 mil cuartos de hotel, obras actualmente suspendidas, pero que se estima sean reactivadas al acabar la actual emergencia sanitaria.
