Según con el Proyecto de Nación 2018-2024, el plan de austeridad de Andrés Manuel López Obrador, está pensado para aminorar el gasto gubernamental en publicidad oficial.
Solo para el 2019 se destinarán mil 872 millones de pesos, sería un 80 por ciento menos que lo desembolsado el 2017, y si bien bajará el gasto corriente, también da un golpe al gremio informativo.
“Si hay una reducción del gasto en publicidad gubernamental definitivamente va haber un adelgazamiento en los medios de comunicación que viven de la publicidad oficial, y por eso es tan necesario que haya una corresponsabilidad de las casas de medios con sus reporteros y que éstos empiecen a identificar los mecanismos para hacer sustentable el medio de comunicación sin depender del dinero público”, aseguró Ana Cristina Ruelas directora regional de Artículo 19 para México y Centroamérica.
El documento Proyecto de Nación 2018-2024, refiere que “Por un principio de justicia social”, se reducirá el gasto en comunicación social de 9 mil 361 millones de pesos a solo mil 872, por lo que se ahorrarían 7 mil 489 millones de pesos al año.
Destaca que el gasto en materia de comunicación social, de 2006 a 2016, asciende a 71 mil 139 millones de pesos, el cual pudo haber servido para construir 284 mil 554 viviendas, considerando un costo promedio de 250 mil por vivienda y 89 hospitales, considerando un costo promedio de 800 millones de pesos por hospital de 144 camas.
En lo que se refiere específicamente a publicidad oficial, la actual administración gastó más de 40 mil millones de pesos en publicidad oficial y 56 por ciento de éste se concentró en 20 medios, mientras que el porcentaje restante se dividió en 3 mil 108 medios. El medio con la mayor concentración es Televisa, con el 16.45 por ciento del gasto; le sigue Estudios Azteca con 9.7 por ciento y Starcom Worldwide con 3.2 por ciento, de acuerdo con el reporte “Democracia simulada, nada que aplaudir”, elaborado por Artículo 19.
“El problema de la publicidad oficial y la relación que existe actualmente entre los medios y el gobierno es que al depender de la publicidad gubernamental adaptan sus líneas editoriales al gobierno en turno, pero además impacta de manera directa en la precariedad laboral de los reporteros, es decir, si se recorta el gasto los ajustes que harán los medios será en su personal”, advirtió la titular de Artículo 19.
De acuerdo con el monitoreo de la Propiedad de los Medios este año el salario de los periodistas en México oscila entre los 4 y los 5 mil pesos, esto representa una caída con respecto a años anteriores y tiene una correlación con la violencia en contra de la prensa, esto se debe a la falta de responsabilidad de las empresas con sus trabajadores.
El 1 de julio una vez que los contendientes a la presidencia de la República reconocieron que los resultados no les habían sido favorables y reconocían el virtual triunfo de López Obrador el 2 de julio muchos de los medios de comunicación viraron sus líneas editoriales, pues muchos de éstos habían sido muy “críticos” con quien será el próximo Presidente.
“Los medios se adecuan como buenas empresas a quien es su mayor cliente, es decir el gobierno, es importante que se reduzca el gasto, la reducción podría ser la medida más fácil, pero no es la medida que se necesita si no viene acompañada de una ley que diga que la publicidad oficial es un mecanismo de comunicación del gobierno y de la ciudadanía pero no para hacer proselitismo, si no para informar y rendir cuentas”, aseguró Ruelas.
La especialista detalló que la reducción del gasto puede ser una buena medida pero al final el gasto va seguir siendo arbitrario mientras no haya criterios claros de asignación y se va a seguir destinando a ciertos medios, favoreciendo a algunos medios sobre otros, en lugar de beneficiar a la mayoría.
“Hay un expendio exorbitante e indiscriminado en publicidad gubernamental que además no es utilizado para informar si no para hacer proselitismo, pero es importante señalar que cualquier gasto, aun cuando sea mucho menor debe venir aparejado de criterios de asignación, objetivos claros y transparentes que den pauta a fomentar la pluralidad y además que no discriminen entre los distintos medios”.
Dijo que puede ser que la reducción esté contemplada en el presupuesto de egresos, pero, como sucedió durante la actual administración, en el presupuesto se aprueban 4 mil millones de pesos y se gastan 9 mil millones al año, es decir, la reducción no exime que pueda haber un subejercicio de otros 7 mil millones de pesos, por lo que lo que se necesita es poner topes al gasto.
“A pesar del recorte, 2 mil millones de pesos siguen siendo muchísimo dinero, y el problema es que si sigue utilizando para el proselitismo de poco sirve que se destinen menos recursos. La medida puede ser positiva en cuanto a la reducción del presupuesto, pero no es positiva porque no existen criterios para la asignación. Lo que tiene que hacer el nuevo gobierno si realmente quiere hablar de un cambio democrático tiene que modificar su relación con los medios de comunicación”, afirmó.
Ana Ruelas destacó que no se puede seguir manteniendo el mismo nivel de dependencia entre los medios de comunicación y el dinero público, por lo que es necesario que los medios generen nuevos mecanismos para que exista más pluralidad, y no sean medios oficiales diciendo que son medios privados.
“La publicidad gubernamental no tiene que ser vista como un subsidio de los medios de comunicación, para eso deben existir otras medidas y otros mecanismos. Se necesita abrogar la ley de comunicación social, generar una nueva ley que fije criterios claros, objetivos y transparentes en la asignación del gasto”, destacó.
Información de: LAURA QUINTERO – Economíahoy.mx